jueves, 20 de junio de 2019

Más vegetales, menos animales: Una alimentación más saludable y sostenible.

Autores: Julio Basulto y Juan Cáceres.
Editorial: Debolsillo.
Fecha de edición: 1ª octubre 2016.
Número de páginas: 344.
Género: Bienestar, nutrición.

Primero pongo la sinopsis del libro y debajo de la foto doy mi opinión, como siempre:

La adopción de pautas alimentarias que dejan total o parcialmente de lado los productos de origen animal es considerada por la población, en ocasiones, una mera opción ideológica, carente de fundamento científico y hasta perniciosa para la salud. De entre dichas pautas, conocidas como «dietas basadas en plantas» (plant-based diets), destacan el vegetarianismo y el veganismo.

Frente a ello, Julio Basulto y Juanjo Cáceres muestran por qué, de acuerdo con el conocimiento científico disponible, el patrón dietético que se relaciona con una mejor calidad de vida y, también, con una mayor esperanza de vida puede sintetizarse en la siguiente máxima: «Más vegetales, menos animales y nada o casi nada de carnes procesadas y alimentos superfluos».

Los autores revisan también en esta obra aspectos históricos de la alimentación y de la hominización, desmintiendo que la alimentación basada en vegetales sea una moda reciente, así como las cuestiones ambientales, éticas e incluso económicas que avalan también optar por esta pauta dietética.

Antes que alguien salte y diga: maaaaaaadre mía ya está el tío este otra vez dándonos la chapa con los veganos, vegetarianos... Para nada. Aunque la sinopsis pudiera dar a confusión y hacer pensar que es un libro sobre veganismo, no es así. Lo trata en parte pero no es específico sobre ello.

Además que ya somos grandecitos para saber cada uno lo que quiere en esta vida y yo no soy quien para decirle a cada uno lo que tiene que hacer. La información está ahí para todos y ya cada uno es libre de hacer con ella lo que quiera.

En parte este libro es más de eso, ´´información´´ sobre como llevar una alimentación más sana donde se combina el rigor científico con una escritura amena. Se trata de valiosa información que incrementa nuestro conocimiento, lo cual contribuye a que nuestra toma de decisiones se lleve a cabo con mayor libertad y no lo hagamos coercionados por las ´´grandes compañías´´ cuyo principal objetivo es aumentar sus beneficios aún a costa de perjudicar nuestra salud.

El libro consta de 344 páginas que aunque puedan parecer muchas, bastantes son referencias a artículos científicos de donde se ha sacado bastante información. Al principio pasaba de las referencias y no le echaba cuentas pero luego se hace interesante verlas aún siendo la mayoría en inglés. ´

El libro es interesante si tienes ganas de ´´aprender´´ algo. Si ya vas con las miras cerradas le vas a dar carpetazo tarde o temprano y lo vas a dejar sin terminar.

La idea principal que defiende es que comer sano significa priorizar el consumo de alimentos vegetales poco procesados, con una mera presencia en nuestros menús de de pescado, lácteos y aceites vegetales y con un aporte muy bajo de cereales refinados (pasta blanca, pan blanco, arroz blanco...) azúcar  o productos azucarados (bollería, repostería, bebidas azucaradas) y carnes rojas procesadas.

El comer más vegetales hace que con su consumo desplacemos el de otros productos insanos y por ende esto mejore nuestra salud. Si bien llevar una alimentación sana no nos va a librar de ciertas enfermedades si va a hacer que el porcentaje de tenerlas se reduzca considerablemente.

Comer más sano está bien. Comer menos insano está mejor. En lugar de cuidarnos en las comidas deberíamos cuidarnos de ciertas comidas.

Más vegetales y menos animales significa una alimentación más saludable, más sostenible para el palneta y más respetuosa con los animales, sobre todo si ese ´´menos´´ tiende a cero.

Somos omnívoros culturales. Somos seres culturales y como tal hemos establecido criterios subjetivos sobre lo ´´comestible´´ y lo ´´no comestible´´.

Yo sigo pensando que no somos dioses y que no tenemos ningún derecho a decidir sobre que seres vivos viven y quienes no; todos tenemos el mismo derecho a hacerlo. Y sigo pensando que el futuro tiene que ser Vegano, por los animales y también por nosotros ya que es la única forma de que el planeta donde vivimos aguante para las generaciones posteriores ya que de otra forma sería inviable. En tu mano está informarte sobre la explotación animal y sobre la explotación del planeta, eso o mirar para otro lado pero luego no digas que tú no sabías de que iba el tema.

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