miércoles, 27 de febrero de 2019

VI Trail Valle de Almanzora, 55km, Pº5.

El domingo pasado tomé parte en la sexta edición que se hacía del Trail del Valle Almanzora.
Esta carrera ya la había hecho en el 2013 que fue su primera edición y no acabé muy entusiasmado que digamos ya que en aquella ocasión la señalización fue muy escasa y de pena; este año por suerte salvo dos puntos la señalización estuvo bien.

Salí en la carrera de 55km y +1250m, como en 2013. Se realizaban también a la vez una carrera de 21km y una de 29km pero uno como es borrico pues allá que va a la larga.

Mi pretensión en esta carrera no era otra que hacer un buen entreno de cara a la Bandolerita de este sábado. Que tenía entreno largo el sábado y el domingo pero en vista de que ya estaba flojeando mentalmente y físicamente y para no saltarme todos los entrenos me apunté el jueves a última hora a la carrera y así me aseguraba el rodaje largo del domingo.

Dan la salida puntualmente, a eso de las 9:30. A mi parecer bastante tarde pero es que en Olula del Río a esas horas hacía fresquete. Antes todos los participantes se echaron la foto de rigor, a mí me pilló en el WC para variar...

Salen las tres carreras juntas por una rambla y enseguida se estira la cosa muchísimo. Me fijo en los dorsales de la gente y de los de 55km veo pocos. Veo que delante mía se está haciendo un grupito que resulta ser de la carrera de 21km donde va Ismael y Pulpo que me pregunta a que distancia voy.

No van muy rápido para ser la de 21km pero sí para hacer 55km a ese ritmo pero lejos de aflojar, y eso que llevaba el pulso por las nubes, me digo que le tiro y aguanto con ellos lo que pueda y que si reviento pues reviento con gusto y ya cuando me arrastre veo como hago para llegar a meta.

Dicho y hecho. Los llevo a 20m todo el rato por la zona de rambleo justo hasta llegar al barranco donde se me van yendo un poco ya que ahí no quiero arriesgar mucho para no caerme.

Para el que no haya estado nunca decir que el barranco por donde pasamos está provisto en algunos puntos de escalones de esos de metal, cuerdas y cadenas por donde hay que tirar sí o sí porque si no es imposible subir. Vamos que correr correr tampoco mucho.

En esta zona me pilla un chico de Mallorca que al final hizo segundo. En esta carrera estamos cuatro gatos y los cuatro gatos que estamos somos dos de Almería y el resto de Mallorca. El organizador se ve que es de origen mallorquín y que se las apaña todos los años para que la gente de Mallorca no falte a la cita. La verdad que chapó por él porque el circuito no es que sea muy atractivo que digamos.

Al principio voy tirando yo pero al rato le cedo el paso a él y yo le sigo aunque al final del barranco se me va un poco. Me lleva fuera de punto para seguirlo y decido levantar un poco el pie porque entre que no corría mucho el aire por allí estaba ya atufado.
En las zonas donde había cadenas había que dejar que acabara de pasar el compañero por la zona porque si la cogía él y luego tú detrás y tensabas al de delante le podías joder bastante la mano.

Pasamos la zona más bonita de la carrera (para venir a hacerlo tranquilamente y no corriendo) y llegamos al primer avitullamiento que se sitúa en un cruce donde paro a echar agua. Sigo y con las mismas me pasan dos y al rato vienen en dirección contraria otros dos renegando que si era por allí o no. Mis compañeros de ruta le dicen que sí y el tío empieza a renegar que vaya huevos que si fulanito le había tirado para otro sitio... Vamos no se pelearon de milagro... me pareció desproporcionado el paripé por parte de uno...

Sigo a lo mío intentando que no se me vayan. Esta zona es complicada ya que hay un montón de cañas sueltas y hay que ir con tiento para clavarte una en la cara y no tropezar con las zarzas que nos iban dejando las piernas bonicas. Al rato nos escontramos el cruce donde los de 29km seguían recto y nosotros nos desviábamos hacia la derecha montaña arriba. Decir que este punto a mi parecer estaba algo escaso de señalización, no estaba clara la cosa, pero atiné gracias a que llevaba justo a dos delante que se lo conocían bien.

Estos en la subida me sacan un tiempo y los pierdo de vista. Vereda y al rato rambla con arena de esta suelta donde te vas quedando clavado. Intento no venirme abajo y poner mi marcheta e ir haciendo camino. Miro para atrás y no viene nadie y por delante tampoco veo a nadie.

Se me va un poco el estómago y tengo que hacer una primera parada de emergencia por si tal pero nada. Arranco y al rato veo a lo lejos a los dos corredores. Empieza aquí una ligera subida que se hace andando porque pica y ya el calor está empezando a asomar. Intento llegar a ellos poco a poco pero no lo acabo de lograr y tampooco me quiero cebar en ello.

Bajadilla rápida y más rambla sin llegar a cogerlos.
Al tran tran llego al siguiente avituallamiento y veo a los dos que llevaba delante. Pregunto en que puesto voy y me dicen que el quinto contando el que se acaba de ir y el que quedaba en el avituallamiento que se queda renegando que a él lo que le gusta es el monte y no tanta rambla, en eso estamos de acuerdo pero yo no me paro a charlar y salgo rápido en cuarto lugar.

El tercero lo llevo a pocos metros. Repecho duro de cemento que hacemos andando y comienza aquí una bajada larga donde se le puede dar zapatilla. Voy ´´cómodo´´ hasta que se me va el estómago y aquí si tengo que parar más tiempo a ... puffffffffffff vaya cruz cuando me pasa esto. El que llevaba delante se me va y lo pierdo de vista.

Arranco y ya veo que voy tostadillo de más, sería el km 30 o así y veo que aquello se me va a hacer largo pero trato de relativizar. Voy pensando en la Bandolerita y en que me quedarían todavía 50km y bastante desnivel positivo... vaya berenjenales en los que me meto yo solo.

Llego al siguiente avituallamiento en un pueblo donde paro más tiempo a beber y comer algo, aquí ya voy recalentado de más. No miro nunca atrás pero cuando estoy saliendo llega un corredor aunque no miro quién. Al rato en la zona más complicada por lo estrecha me pasa Pepe Segura al que ya estaba esperando que me cogiera hace un buen rato. Es una eminencia en esta prueba, creo que las ha hecho todas las ediciones y cada vez va a más en la clasificación, me alegro por él porque es una excelente persona.

Me pego a él pero imposible, vooy fundiiiiiiiiiido y se me va. Antes me dice que la prueba se queda en 51km que este año han quitado un bucle. Pienso que dios le oiga que voy justísimo pero ya no sé si lo ha hecho por animarme al verme tan mal o qué.

Vamos bajando por una vereda donde de vez en cuando sale una canaleta con agua para regar, no lo pienso y me echo agua a más no poder, uffffffffff eso me da la vida. Al salir de la vereda llegamos a otro pueblo y en un cruce tiro para la izquierda porque había cintas pero también había hacia la derecha. Dudo y me doy la vuelta y me digo que yo ya no estoy para subir más metros y que sea lo que dios quiera, menos mal que atiné y era para abajo. Este punto es el peor señalizado de todos porque te hacía dudar muchíiiiiiiiiiiiisimo al haber cintas en los dos lados.

Llego al siguiente avituallamiento y veo que Pepe va ahí al lado, cosa que me extrañaba para lo mal que iba yo pero mete la directa y se va. Pregunto en el avituallamiento que cuando queda y me dicen que 10km por lo que más o menos se quedaba la cosa en 51km, que fiera Pepe que se la conoce al dedillo jajajajaj.

La última parte es quizás la más fácil de correr , con algún tramo de asfalto incluso. Hay unos pequeños toboganes que hago ya arrastrándome. Esta vez si voy mirando hacia atrás para ver quién venía por detrás pero no asomaba nadie. Vamos no me retiré antes porque iba cuarto y lo veía una falta de respeto a todos los que venían detrás que si no...
Aunque tampoco voy tan mal. Se puede ver en la foto que acabé fresco como una rosa y disfrutando tela de la prueba jajajajaja.


Voy ya muerrrrrrrrto perdido y me voy poniendo como objetivo correr x minutos y caminar 20´´ y así hasta meta, saliendo 52km y +1250m a una media de 6´01´´. Contento con la carrera por saber gestionarla sabiendo que iba a reventar muy mucho al final aunque contrariado porque veo que a la Bandolerita llego cogido con pinzas para poder acabarla y para más inri me he puesto malo con un resfriado de aupa, en fin, veremos a ver que tal se da aunque eso ya es otra historia. Salud y kms.
En cuanto a la carrera si repetiría o no? la bolsa del corredor es aceptable, con una camiseta bonita de diseño, unos calcetines joma, una bebida de aloe, muestra de crema y la medalla de finisher al acabar. Al finalizar toda la bebida que quisieras y paella. Por todo esto que he mencionado sí volvería pero es que el pero grande es el circuito. La zona del barranco poco se puede correr, ahí ya es lo que tú quieras arriesgar y el resto la mayoría es rambleo y pista que no me atrae, ya es según lo que vayáis buscando. Eso sí, si decidís hacerla prepararla como si fuera una maratón de asfalto porque tampoco es que tenga mucho desnivel como para meter mucho monte.

martes, 19 de febrero de 2019

Cuando nos volvamos a encontrar.

Tapa blanda: 224 páginas
Editor: Planeta (22 de enero de 2019)
Colección: Crossbooks
Idioma: Español

Primero pongo la sinopsis como siempre y después de la foto comento: 

La emotiva historia de Pablo Ráez, el héroe que luchó contra la leucemia, contada por su compañera, Andrea Rodríguez. Este es el romance más real que leerás jamás. Él tenía 19 años cuando le diagnosticaron leucemia. Le plantó cara a la enfermedad, vivió cada día como si fuera el último y batió un récord al conseguir un máximo histórico de donantes de médula al movilizar a miles de personas con sus redes sociales. Él miró de frente a la muerte sacándole lo mejor a la vida. Ella era la chica que se enamoró de Pablo. Juntos vivieron unos días llenos de amor, de fuerza, de esperanza y también dolor. Ahora escribe lo que nunca le pudo contar a su novio, en unas páginas que perdurarán como lo sigue haciendo el mensaje de Pablo. ¡Siempre fuerte!


Muchas veces llegamos a algunos libros por recomendaciones de conocidos, porque hemos leído alguna reseña en algún medio, porque son la continuación de una saga... Yo como tantas otras llegué embobado por la portada puffffffff y para más inri esta vez ni me leí mucho de que iba el libro, la vi, me enganchó y con las mismas de cabeza fui y lo compré. Sé que lo más importante de un libro es el interior pero si los autores no cuidan detalles como la portada, si el libro no tiene buena publicidad detrás, difícilmente va a llegar a captar la atención de la gente y a venderse.

No me gustan nada esos libros que en la portada pone que el prólogo lo escribió fulanito y sale el nombre más grande que el del autor o el título del libro o que es la novena edición y ocupa media portada sin poder quitarlo;son gilipolleces pero son cosas que a mí particularmente no me gustan nada ya que me gusta que todo el protagonismo lo tenga el libro desde el principio. Si el libro es bueno me da igual que las dos hojas del prólogo las haya escrito el rey.

En este caso el prólogo es de Dani Rovira, muy bien escrito y puesto en un trozo de hoja que va anexo al libro y que se puede quitar.

Vamos al libro que me lío.
Una vez que me puse con él ya vi que conocía la historia de Pablo Raéz ya que salió en todos los medios de comunicación. La historia de sus vidas, la de Pablo y la de su pareja Andrea, es contada por ella misma en este libro.

Pese a conocer la historia por las redes sociales y medios de comunicación,  a través de las palabras de Andrea ésta cobra otra dimensión y te puedes hacer una nueva idea mucho más dura de lo que uno se imagina de lo que es esta enfermedad. La verdad que le ha echado un par de pantalones para volver a recordarlo todo y escribir el libro, chapó y mil gracias porque es de las historias de amor más bonitas que uno puede leer. Al principio puede parecer ñoña pero no lo es. Y lo que es más importante y que transmite el libro que es que debemos de exprimir todos los segundos de nuestras vidas como si fueran los últimos y disfrutar de la vida.

Es de esos libros que te lees rápido porque siempre quieres un poquito más y que te va enganchando tanto que pese a saber el final de la historia antes de empezarla el personaje te hace que te enganches tanto por su coraje que esperas que el final sea otro, olvidándote del final y quedándote un regustillo amargo cuando ocurre pero lejos de eso nos tenemos que quedar con el mensaje que transmite que no es otro que vivir y ayudar al que tenemos al lado en la medida de nuestras posibilidades.

Si tenéis ocasión haceros con el y leerlo porque merece mucho la pena.

Añadimos el libro a la lista de libros de temática no deportiva por orden de preferencia. Ya he dicho mil veces que esto es muy subjetivo. Lo pondría de todos estos el 3, aunque fácilmente podía haber ido el 2.
1. Tenía que sobrevivir (Roberto Canessa y Pablo Vierci).
2. La Catedral Del Mar (Ildefonso Falcones).
3. Cuando nos volvamos a encontrar (Andréa Rodríguez).
4. Bushido: el código ético del Samurai y el alma de Japón (Inazo Nitobe).
5. María de Villota. La vida es un regalo.
6. La razón de estar contigo. Tu mejor amigo (W.Bruce Cameron)
7. Desperté (Ángel Alfonso Muñoz Díaz).

 Ya sabéis en facebook o instagram me podéis dejar vuestras recomendaciones sobre otros libros o comentar este, ya que por blogger no se por qué no deja poner comentarios ahora. Salud y buena lectura.

viernes, 8 de febrero de 2019

Bushido: el código ético del Samurai y el alma de Japón.

Tapa blanda: 289 páginas
Editor: Miraguano Ediciones; Edición: 1 (1 de diciembre de 2005)
Colección: Libros de los Malos Tiempos


Primero pongo la sinopsis y después de la foto comento el libro.

La expresión Bushido (en castellano, el “camino del guerrero”) alude en su origen al código ético o de honor de los samuráis que florecieron en el Japón feudal y que, tras la restauración Meiji de 1868, continuó renovándose hasta constituir una importante fuerza cultural cuya impronta determinó en buena medida la creación del Japón moderno. El Bushido, sin embargo, carecía de textos que permitieran su comprensión para los extranjeros, y fue precisamente este vacío el que pretendió llenar el diplomático y educador japonés Inazo Nitobe (1862–1933) con el presente libro que, cien años después de su publicación, se ha convertido en una de las mejores introducciones tanto al estudio de la tradición caballeresca del País del Sol Naciente en particular, como de la mentalidad japonesa en general. Escrita en un excelente inglés victoriano, la obra se compone de un conjunto de ensayos elaborados de forma que los argumentos expuestos en cada uno de ellos puedan compararse con sus equivalentes europeos, y así Nitobe profundiza en ciertos aspectos del budismo, el shintoísmo y el confucianismo buscando similitudes y contrastes con el pensamiento filosófico de los clásicos griegos o romanos, por ejemplo, o con las tradiciones bíblicas, para ofrecer, en suma, un brillante trabajo de síntesis que exigió a Nitobe el despliegue de sus eruditos conocimientos sobre cultura occidental. Con este libro, el autor vio cumplido su deseo de servir "de puente entre Oriente y Occidente”, y su lectura aporta aún hoy elementos imprescindibles para el conocimiento mutuo de ambas culturas, así como un mensaje básico para cualquier artista marcial que valore y desee conocer de primera mano los ideales del samurái.
Uhmmmmmm poco que decir ya tras la extensa sinopsis de arriba porque lo ha explicado bastante bien.

La mejor manera de conocer otras culturas es viviéndola uno mismo, a falta de eso siempre tendremos la lectura para llegar a ellas. La verdad que el mundo del Japón, China... es algo que siempre me ha despertado curiosidad de ahí que me decidiera por este libro, eso y que no me canso de ver una de mis películas preferidas que tiene que ver con el tema y que más adelante escribiré sobre ella. Leyendo el libro eres mucho más consciente de cosas que pasan en la película y se entienden mucho mejor; de no ser así pasarían desapercibidas.

En el libro Inazo Nitobe dedica la mayor parte a describir por capítulos las 7 virtudes principales que debían poseer los bushi (samurais):

  • El sentido de la rectitud o la justicia.
  • El espíritu del coraje, de la audacia y de la resistencia.
  • El sentimiento de la benevolencia y la piedad hacia el dolor ajeno
  • La práctica de la cortesía y del respeto.
  • La sinceridad y la veracidad
  • La defensa y mantenimiento del honor
  • La lealtad.
Lo hace de una manera sencilla y muy comprensible pero metiendo un montonazo de referencias que muchas veces nos pueden llevar a saturar, aunque otras como en mi caso en las que alude a los clásicos griegos o romanos me han gustado bastante. Destacaría a Confuncio cuyas enseñanzas fueron  la fuente más prolífica del Bushido.

Del Bushido destacaría su entrega ferrea a su señor sin dudar, quitándose la vida ellos mismos si llegado el caso se lo pidiera con el Seppuku o conocido más popularmente como Hara-Kiri clavándose su espada en el abdomen, pues según ellos ahí es donde residía su alma.
La rectitud con la que viven y el que según su cultura siempre hay una mejor manera de hacer las cosas y esa es la que vale.

Lo que menos me ha gustado ha sido  el papel que le dan a la mujer. La cual desde que nace tiene como principal misión el cuidar a la familia y su marido; se puede entender de un modo machista aunque ellos no le dan ese caracter y si el de ser una función igual de importante como la del samurai.


Añadimos el libro a la lista de libros de temática no deportiva por orden de preferencia. Ya he dicho mil veces que esto es muy subjetivo. Lo pondría de todos estos el 3. Imposible antes que La Catedral Del Mar pero si ya delante del de María de Villota y que me ha aportado más que los que van por debajo.
1. Tenía que sobrevivir (Roberto Canessa y Pablo Vierci).
2. La Catedral Del Mar (Ildefonso Falcones).
3. Bushido: el código ético del Samurai y el alma de Japón (Inazo Nitobe).
3. María de Villota. La vida es un regalo.
3. La razón de estar contigo. Tu mejor amigo (W.Bruce Cameron)
4. Desperté (Ángel Alfonso Muñoz Díaz).

 Ya sabéis en facebook o instagram me podéis dejar vuestras recomendaciones sobre otros libros o comentar este, ya que por blogger no se por qué no deja poner comentarios ahora. Salud y buena lectura.