miércoles, 4 de julio de 2012

El libro.

Ahora si, que es lo que toca jajaja. Ufffff el libro. Está claro que el libro tenía que ser como era ya que es autobiográfico, pero lo que es el personaje en si deja mucho que desear. Por lo menos yo no me lo creo. Para el que no lo conozca David Millar es un ciclista profesional que llegó a ser de los punteros, fué cazado mas tarde por dopaje y luego volvió a correr otra vez en profesionales y ahí sigue. Lo que cuenta en el libro es su historia, sobre todo relacionada con el dopaje. Para empezar no me creo que solo haya visto el dopaje una vez que llega a profesionales. Yo en élite estaba harto de verlo, lo mismo que vió el; no hacía falta correr el tour de francia para ver eso. No me creo tampoco que se pueda pasar de por decirlo de alguna manera, matar monjas todos los días y luego reconvertirte en sacerdote, comprar un convento y sobretodo predicar con el ejemplo. No creo el paso del blanco al negro como si nada, hay un término medio y según David Millar es ahora el nuevo mesias del ciclismo, predigando la limpieza y tal y tal y que no le baila el agua pues es un capullo, aunque antes fuese su amigo. Para mi parecer se las da de esos que tienen que hacer ciertas cosas en la vida para estar completo, como plantar un árbol, escribir un libro... y esta era la parte que le tocaba. Pienso que lo que tiene es ansia de protagonismo y le gusta que le iluminen los focos. Porque según una parte del libro decía que no se podía correr una gran vuelta sin ir dopado y ahora que va limpio, en un año va y se casca giro, tour y vuelta; vamos no me jodas. No es que esté del todo mal el libro pero como ya he dicho yo no me lo creo. La verdad que el que venga un poco de nuevas en esto del ciclismo es una buena forma de abrirle los ojos y que vea lo que hay, aunque cuando se habla de ciclismo para mi bastande del deporte de élite sigue el mismo sistema, aunque cueste creerlo.

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